El bar Copacabana, situado en el número 33 de la calle Ramón Luján, escondía detrás de una estantería un espacio oculto adaptado para la celebración de orgías privadas
El pasado domingo, a primera hora de la mañana, agentes de la Comisaría Integral del Distrito de Usera descubrieron, en una revisión rutinaria tras una llamada por exceso de ruido, una sala oculta tras la estantería de un bar del barrio de Almendrales. Tal y como concluyeron los agentes, en este espacio se celebraban orgías de pago para los clientes más selectos del bar Copacabana.
Este local, que había recibido numerosas denuncias por parte de vecinos de la zona, se convertía en un conocido after al terminar la noche. Al realizar el conteo del aforo y comprobar que duplicaba el permitido, los agentes instaron al responsable del local a solucionarlo. Una de las personas afectadas, obligadas a abandonar dicho espacio, confesó a la Policía que el bar “ocultaba un cuarto detrás de una estantería de madera donde se practica sexo por dinero”.
Dentro de dicho espacio, una antigua cocina que fue clausurada por no cumplir con los requisitos legales de salubridad, fueron encontradas un total de nueve personas, portando cientos de euros en efectivo y sustancias estupefacientes como poper.
El local, que ha sido precintado, se encuentra a unos pasos de la calle Marcelo Usera, principal vía del distrito, a la altura de los números 57 y 59, y a tan solo 300 metros de la estación de Metro de Usera.