No habrá arcos chinos en Usera, al menos por ahora. Ninguna empresa se ha presentado a la licitación del Ayuntamiento de Madrid para la construcción de los dos arcos chinos del proyecto “Chinatown” en la calle Dolores Barranco, con los que pretendían tematizar la zona con elementos de la cultura asiática, tal y como ocurre en ciudades como Londres o Nueva York.
La licitación lanzada por el consistorio en julio para la construcción de los arcos, a cargo de la Junta Municipal de Distrito de Usera, quedó desierta. A pesar de que el gobierno local había asignado un presupuesto de 225.000 euros, ninguna empresa ha mostrado su interés en asumir el proyecto.
La iniciativa forma parte de los esfuerzos del equipo de gobierno para revitalizar la zona, que cuenta con una importante comunidad y comercios de origen chino.
Las características del proyecto
Los dos arcos, de 10 metros de alto y casi 13 metros de ancho, iban a ser colocados en la calle Dolores Barranco, en un recorrido que incluía la plaza del Hidrógeno y la parroquia de Nuestra Señora de la Soledad. Siguiendo la tradición china, estas puertas suelen ubicarse en lugares de gran significado, como encrucijadas o templos. Además de su valor decorativo, las estructuras iban a contar con iluminación propia y megafonía.
Las obras debían haber comenzado el pasado 2 de septiembre, con el objetivo de que los arcos estuvieran listos para la campaña de Navidad o el Año Nuevo Chino. Ahora, con la licitación fallida, el futuro de estos importantes elementos del proyecto es incierto.